La electricidad estática y las gasolineras

Como imagino que muchos ya sabréis, de hace unos años a esta parte está prohibido usar el teléfono móvil o escuchar la radio cuando entramos en una gasolinera. ¿Motivo? Pues sencillamente que el depósito de nuestro coche contiene, debido a la temperatura, una gran cantidad de vapor de gasolina a presión.

De hecho, si prestamos atención, al abrir el tapón de la gasolina podemos notar cómo se descomprime el interior (suena una especie de bufido sordo). En ese momento sale una gran cantidad de vapor de gasolina que, si encuentra cualquier chispa o fuente de ignición, puede incendiarse -el sistema eléctrico del propio coche o utilizar el teléfono pueden provocar chispas en la batería-. Ese, como podréis imaginar, es el principal motivo por el que también está estrictamente prohibido fumar en las inmediaciones de una gasolinera.

Pero no son esos los únicos "peligros" que podemos encontrar en la rutinaria tarea de llenar el depósito de nuestro coche. Recuerdo con especial fascinación una clase de Seguridad e Higiene Industrial en la que el profesor nos sorprendió a todos empezando la lección con un vídeo (que podéis ver a continuación y que a la postre se convirtió en viral en Internet) en el que la cámara de seguridad de una gasolinera filma un pequeño y repentino incendio que se origina mientras una chica reposta combustible en la estación de servicio.


Pero si la chica no estaba fumando, no aparenta estar usando el móvil y presuntamente tenía el coche apagado ¿cómo es posible que se produzca el incendio? La respuesta la tenía ya Tales de Mileto allá por el siglo VI a.C.: electricidad estática.

¿Puede ser la electricidad estática peligrosa?

A los hechos me remito que sí, en algunas situaciones puede ser un peligro.

La electricidad estática no la vemos, pero podemos notar su influencia en muchos aspectos de nuestra vida. Si alguna vez nos hemos acercado al televisor después de haberlo apagado (habiendo estado funcionando) o hemos metido la mano por debajo del forro de plástico de algún libro, y los pelos del brazo se han inclinado en dirección a alguno de estos objetos, es por la electricidad estática.

Es cierto que en el vídeo anterior no queda claro si la electricidad es la causa principal o la mayor, o bien si hubo otros factores (como que el surtidor no tuviera las medidas de descarga de electricidad estática habituales o fueran ineficientes). En España, por ejemplo, los surtidores (hasta donde yo sé al menos) ni siquiera tienen normalmente "bloqueo de gatillo" como se ve en el vídeo, así que no puedes dejarlo puesto, irte a "cargarte de estática" y volver para provocar la descarga.

¿Y qué tipo de precauciones podemos tomar para evitar vernos involucrados en sucesos como este?

Por ejemplo si te has frotado en la tapicería del coche, es recomendable tocar algo metálico para "hacer tierra" antes de volver a tocar la boquilla.

Prácticamente cualquier prenda de vestir puede adquirir electricidad estática en mayor o menor medida. La lana, la seda, el algodón o el nylon son los más conocidos, pero no todos funcionan de la misma manera. La diferencia entre estos materiales es su habilidad para ganar o perder electrones, o lo que es lo mismo su carácter positivo o negativo en la adquisición de cargas por el contacto o frotamiento entre dos superficies.

Los cuatro tipos de materiales antes nombrados se pueden ordenar de más positivos a más negativos de la siguiente manera: nylon, lana, seda y algodón. Esto no nos dice mucho si no sabemos con qué los frotamos ya que desconocemos si la carga electrostática que se va a crear es mucha o poca. Si nos fijamos en el mentado vídeo, tenemos un claro ejemplo de lo que no se debe hacer en una gasolinera y que podemos explicar para hacernos una idea de cómo funciona la electricidad estática.

Así que nada, mucho cuidado con la electricidad estática, que aunque no la veamos está presente y puede causarnos problemas si no tenemos el cuidado suficiente.

Hasta la próxima entrada y, que la Ciencia os acompañe.