Recientemente vi la publicación del compañero Carles Sadurní acerca de la velocidad que alcanzaría un gato al ser lanzado desde 8000 metros de altura (problemas más extraños me ha tocado resolver en multitud de exámenes, ojo), y me gustaría ampliar este problema con más datos y casuística.
Para empezar, nuestro compañero hizo todos los cálculos correctamente, pero obvió que la atmósfera poseía una densidad continua (1,29 kilogramos por metro cúbico, concretamente). A nivel superficial, la densidad es de 1,225 kilogramos por metro cúbico. La diferencia es pequeña pero, trabajando con números tan grandes puede dar ligeros errores. Igualmente este valor no lo voy a usar en todo el proceso.